El museo está instalado en el Molino Viejo, un edificio de piedra exponente de la arquitectura industrial del siglo XIX, que expone diferentes métodos y artilugios para extraer el aceite de oliva. A través de grabados, se ofrece una visión de la importancia del aceite de oliva, mediante reproducciones de ánforas olearias romanas, lucernas, candiles y otros instrumentos de alumbrado que funcionaban con aceite. En la segunda sección encontramos una espartería donde se ilustra todo el proceso del esparto. Hay un molino de los denominados de sangre utilizado para la molturación de la aceituna hasta que apareció la electricidad. Pero el conjunto más singular del Museo lo constituye una prensa de la denominadas de viga del siglo XVII construida en madera de roble y piedra caliza. Cuenta, además, con dos reproducciones de prensas; una grecorromana de cuñas y otra de capilla y una colección de tinajas de los siglos XVIII y XIX. En perfecto funcionamiento existe un molino completo de correas con moledero, bombín y prensa hidráulica.